El delantero salvadoreño Rodolfo Zelaya ha decidido poner fin a su relación con el equipo Alianza tras llegar a un acuerdo con la dirigencia para rescindir su contrato de manera amistosa. Este desenlace, que será anunciado oficialmente en una conferencia de prensa, marca el cierre de una etapa importante para el jugador, quien se destacó como una figura emblemática del club capitalino. La noticia fue confirmada por un miembro de la junta directiva, quien además señaló que la salida de Zelaya se da en buenos términos, lo que abre la posibilidad de organizar un partido de despedida en su honor.

La decisión surge tras un periodo complicado para el delantero, quien no logró consolidarse como titular en el torneo Apertura 2024. Con escasos minutos en el terreno de juego, su situación generó un análisis conjunto entre el jugador y la dirigencia, concluyendo que lo mejor para ambas partes era terminar el contrato de manera anticipada. Según declaraciones de un dirigente, aún se están definiendo detalles económicos relacionados con la desvinculación, pero se enfatizó que la intención es reconocer la contribución de Zelaya con un evento especial que resalte su legado en el club.




El técnico del equipo, Ernesto Corti, y el cuerpo técnico también reconocieron que el estado físico del jugador fue un factor determinante en esta decisión. Aunque Zelaya ha sido un referente histórico del fútbol salvadoreño y del Alianza, su rendimiento físico en los últimos torneos no le permitió mantener el nivel competitivo esperado. Esto, sumado a las pocas oportunidades que tuvo en el Clausura 2025, llevó a que su permanencia en el equipo no fuera viable para este nuevo ciclo. “Es algo que ya era de conocimiento público”, mencionó un dirigente respecto al estado físico del jugador.

La salida de Zelaya representa una pérdida significativa para el Alianza, no solo por su capacidad como futbolista, sino también por el peso simbólico que tenía dentro del club. Durante su trayectoria con los albos, logró conquistar ocho títulos de Primera División, dejando una marca profunda en la historia del equipo. Su influencia dentro y fuera del campo lo convirtió en un referente para la afición, que ahora enfrenta la noticia de su partida con una mezcla de nostalgia y gratitud por los momentos compartidos.

Aunque el futuro del delantero aún no está definido, su trayectoria lo respalda como uno de los grandes referentes del fútbol salvadoreño. A sus 36 años, Zelaya cierra un capítulo importante en su carrera, dejando abierta la posibilidad de nuevos desafíos. Su salida del Alianza no solo marca el fin de una etapa, sino también el inicio de una nueva en la que buscará continuar aportando su talento en otros proyectos. Mientras tanto, el equipo capitalino deberá encontrar la forma de llenar el vacío que deja un jugador que, durante años, fue sinónimo de liderazgo y pasión por el deporte.