Isidro Metapán logró un importante triunfo por 0-2 ante Platense, rompiendo una sequía de 250 minutos sin anotar y poniendo fin a la racha positiva de los viroleños, quienes venían de conseguir dos victorias consecutivas. El encuentro, disputado en el estadio de los platenses, fue una batalla de estrategias, donde el equipo visitante, con goles de sus juveniles Steven Guerra y Melvin Urbina, logró imponer su superioridad. La victoria no solo significó tres puntos cruciales en la liga, sino también una muestra de carácter y determinación del equipo, que venía de un inicio complicado.

El partido comenzó con Platense mostrándose más peligroso en los primeros minutos, creando la primera jugada de peligro al minuto 6. El colombiano Nayan Bello, en una acción individual, casi abrió el marcador con un remate que pasó rozando el poste de la portería defendida por el arquero charrúa-cuscatleco Víctor García. A pesar de esta llegada inicial, el Isidro Metapán logró hacerse con el control del balón, pero sus intentos de penetrar la defensa local se vieron frustrados por la ordenada zaga de Platense. El juego de los jaguares, si bien dominaba la posesión, carecía de profundidad en el ataque, lo que facilitaba la labor defensiva de los viroleños.




En el primer tiempo, el Isidro Metapán, aunque se hacía con la pelota, no conseguía concretar las oportunidades. Por su parte, Platense, que parecía tener mayor iniciativa en los primeros compases del encuentro, no lograba capitalizar sus intentos ofensivos. La primera tarjeta amarilla del partido llegó al minuto 15, cuando Josué Rivera cometió una falta innecesaria sobre Palacios en el centro del campo. A pesar de algunos ajustes tácticos, como el cambio de bandas entre Guerra y Cetré, los jaguares seguían sin penetrar la defensa local. El portero de Platense, Sandro Melgarejo, tuvo que intervenir en varias ocasiones para evitar goles, destacándose con un par de atajadas importantes, especialmente ante un potente disparo de Steven Guerra al minuto 35 y un remate de Cetré al 43’, que también fueron bien contenidos por el guardameta.

El segundo tiempo comenzó con un cambio en la alineación de los jaguares, con el ingreso del colombiano David Enrique Livingston. Este cambio resultó clave para el desarrollo del juego, ya que Livingston, con su presencia en el ataque, permitió que Isidro Metapán rompiera la defensa de Platense. Al minuto 47, una jugada que parecía desorganizada, terminó en el primer gol del partido. Josué Rivera envió un pase largo a las espaldas de la defensa local, encontrando a Livingston, quien dejó que el balón pasara para que Steven Guerra, en posición más favorable, marcara el 1-0 con un remate bajo que superó al portero Melgarejo. Este gol cayó como un balde de agua fría para Platense, que, hasta ese momento, había sido el equipo con mayor volumen de juego ofensivo. Con el marcador en contra, Platense se volcó al ataque, pero sus intentos fueron infructuosos debido a la falta de precisión en los últimos metros.

El equipo local, buscando el empate, realizó varios cambios, incluyendo la entrada de Gilberto y la juventud de Roque y Julián Silvestre, con la esperanza de fortalecer su ofensiva. Sin embargo, la presión de Platense no fue suficiente para perforar la sólida defensa del Isidro Metapán, que, a pesar de algunos momentos de tensión, se mantuvo firme. El equipo visitante, por su parte, realizó ajustes para equilibrar su medio campo y mantener el control del juego. La entrada de Jonathan Esquivel y el “Clavo” Portillo, quienes aportaron frescura y agresividad al ataque, fue decisiva para sellar la victoria en los últimos minutos.

El marcador definitivo se selló en el tiempo de descuento, cuando el juvenil Melvin Urbina, quien acababa de ingresar al campo, aprovechó un centro de cabeza de Esquivel para poner el 2-0 al minuto 90+4’. Urbina, con gran serenidad, definió de tiro cruzado ante la salida de Melgarejo, sentenciando el encuentro y otorgando tres puntos muy valiosos al Isidro Metapán. Esta victoria no solo rompió la sequía de goles del equipo, sino que también fue un alivio para el plantel, que necesitaba un triunfo para recuperar la confianza y seguir sumando en la liga. La victoria también sirvió para demostrar la efectividad de sus jóvenes talentos, quienes fueron los encargados de dar el golpe definitivo en este partido crucial.