La primera división ha expresado su posición con respecto a la disputa entre AGM Sports y la Federación Salvadoreña de Fútbol (Fesfut) en torno a la organización de partidos amistosos para la selección nacional mayor. AGM Sports anunció acciones legales contra la Fesfut, alegando que esta violó su derecho de prioridad en la organización de amistosos, lo que generó pérdidas significativas para la empresa.
Ante la falta de claridad por parte de la Fesfut, la primera división ha tomado una postura firme al decidir no ceder más jugadores para partidos que no se realicen en períodos protegidos por FIFA. Samuel Gálvez, presidente de la máxima categoría del fútbol salvadoreño, declaró que esta decisión se tomó debido a los acuerdos previamente establecidos y a la necesidad de proteger los intereses de la liga y sus jugadores.
Gálvez también expresó la urgencia de resolver este conflicto con la Fesfut mediante el diálogo, ya que la liga tenía planes para organizar un partido amistoso cuyos ingresos irían directamente a las arcas de la primera división. Sin embargo, la Fesfut decidió tomar el control de la organización del partido, lo que limitó las opciones de la liga y sus futbolistas.
“Lo que pasaría ahí (si no se resuelve el impase) es que va a ser bien difícil que les prestemos a los jugadores para partidos amistosos que no sean en fecha FIFA, porque esos fueron los acuerdos que tomamos. Si no nos resuelven el problema es una decisión ya tomada que no vamos a prestar a los jugadores”; fue lo que mencionó el coronel Gálvez.
A pesar de haber avanzado en negociaciones para programar un encuentro amistoso contra Guatemala o Ecuador, la falta de autorización por parte de la Fesfut llevó a la renuncia de estas opciones. La incertidumbre persiste mientras ambas partes buscan resolver este impasse, que tiene implicaciones significativas tanto para la selección nacional como para la liga mayor del fútbol salvadoreño.