El equipo norteño sigue pasándola mal en los temas, tanto económico, como administrativo, pero el que sin duda tiene en vilo a la escuadra chalateca es éste último, ya que aún desconoce si podrá disputar el torneo Clausura 2017 de la Primera División.

Chalatenango ha convivido con varios problemas en el pasado torneo Apertura 2016, donde se presentaron inconvenientes con el salario de los jugadores, con su ex entrenador Rubén Alonso (reciente campeón de Segunda División), el cual terminó casi a los golpes con el ex – presidente del equipo,  Francisco Peraza, en pleno terreno de juego tras perder (2-3) frente al Alianza por la jornada 15 en el estadio Gregorio Martínez, ese mismo escenario que por un par de ocasiones no pudo utilizar el cuadro morado para sus entrenamientos debido a un conflicto entre los ¡dos presidentes que llegó a tener al mismo tiempo!




Todo lo anterior ha venido sumando para que el conjunto de los alacranes, ahora se enfrente a un problema mucho más grave para sus aspiraciones, ya que, según el vicepresidente de FESFUT, Hugo Carrillo, el equipo no pagó la fianza a tiempo para poder disputar el torneo que se avecina y podría descender de forma automática a la segunda división, tal como sucedió con Atlético Balboa en el año 2011 por no cumplir con el mismo requisito que exige la máxima categoría del fútbol nacional.

La directiva de CD Chalatenango dio a conocer hace un par de días, mediante un comunicado, su postura ante los rumores que ponen al equipo en la liga de plata, asegurando que los 12 equipos de la Primera División pagaron la fianza tal como lo establece la liga mayor, sin embargo, tanto Hugo Carrillo (FESFUT) como el representante de Metapán, Roberto Campos, han manifestado que el cuadro morado no hizo el pago durante el período establecido (hasta el 20 de diciembre), el cual no podía ampliarse.

Ahora sólo queda esperar la resolución del comité ejecutivo de la Federación Salvadoreña de Fútbol, la cual se reunirá en los próximos días para aclarar este tema, y al mismo revisar si los demás equipos cumplen con los requisitos que exige la Primera División.

En todo caso, si se confirma lo de Chalatenango, no habría descenso para este torneo y tendría que descansar un equipo en cada jornada (sin otorgarle los puntos), y a medio año subiría el campeón de Segunda División, de la misma manera que ha sucedido en los últimos torneos.